Hoy es un día particular, aunque no esté puesto en el calendario litúrgico se celebra el Viernes de Dolores, es un recuerdo de los Dolores de María, la Madre de Jesús, el Viernes antes del Domingo de Ramos.
A María, también se le ha dado el título de co-redentora pues Ella, junto a Jesús, entregó su vida por la Salvación, según el proyecto del Padre. Ella no derramó como Jesús su sangre en la Cruz, pero, como Madre, recorrió el mismo Camino del Hijo y al pie de la Cruz "una espada le atravesó el corazón".
Ella conoció el dolor del Hijo desde el mismo momento en que Simeon, en la puerta del Templo, le anunciara la pasión de su corazón. Una pasión que sólo una madre puede conocer y vivir tan intensamente cuando, junto al hijo, va viviendo cada uno de sus pasos y sus caídas, sus azotes e insultos, hasta finalmente no sólo ver cómo se desangraba en la Cruz, sino aceptar, como aceptó la Voluntad de Dios en Nazareth, el encargo de ser la Madre de todos los hombres.
Porque así como el Hijo no sólo entregó su sangre en la Cruz por nosotros, sino que también nos entregó a María como Madre nuestra, Ella no sólo entregó al Hijo en la Cruz sino que nos aceptó a nosotros, pobres pecadores, como hijos suyos al igual que el Hijo.
Su dolor como Madre es lo primero que comenzamos a vivir en esta Semana Santa, un dolor que cobra sentido junto a la Cruz de Cristo, un dolor que es redentor pues es la Voluntad del Padre que Ella, con corazón generoso como en Nazareth, acepta con disposición total y absoluta.
Así María se convierte para nosotros en modelo de disponibilidad a la Voluntad del Padre, como diría algún Papa: "es un cáliz abierto al infinito para ser colmado sólo por la Voluntad de Dios". Y es Él quien así como la cubrió con la sombra del Espíritu Santo, el día de la Anunciación, en esta Semana de Pasión la vuelve a colmar con sus Dones para que, junto a Jesús, pueda estar de pie junto a la Cruz siendo así no sólo Madre de Cristo y Nuestra, sino maestra de vida en la obediencia a la Voluntad del Padre hasta dar la Vida por Él.
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